APRENDIENDO MÁS...

03/04/2014

“Toca algo nuevo”, me dice Isra. Cada vez que oigo esas tres palabras me tiemblan las canillas. Me cuesta bastante enfrentarme a algo nuevo. Por otro lado decir que normalmente cuando hacemos algo nuevo, él lo hace primero con Noor o con Onix y lo único que hay que hacer es fijarse en como lo hace él y luego repetirlo tú. Pero creerme que cuando lo ves parece fácil, pero cuando te toca a tí, la cosa cambia. Y eso que sólo eran unos guiaditos, pero es que soy muy cuadriculado. 

Pues nada, comenzamos, ya tenemos a Trosky preparado, nos ponemos a su lado, cogemos comidita, Fuss y salimos despacito porque, si no, salta un poco al salir y queremos evitar esto, cuando va como a nosotros nos interesa, nos paramos y le damos de comer. Fácil, ¿verdad?, pues para este ejercicio tan simple, no sabéis la cantidad de cosas que hay que tener en cuenta que no salte, que no te toque la mano, que no adelantes la mano, etc… Pero, bueno, al final lo conseguimos, un par de repeticiones buenas y rompemos el ejercicio ¡¡¡¡¡muyyyy contentos!!!!.

Foto: Javier Payno

Al haber tenido algún que otro problema el día anterior en el salto, hoy vamos a repetirlo, esta vez estamos Isra y yo sólos y trabajamos el ejercicio cómo si estuviera yo sólo. La verdad que, mucho mejor, Trosky está más centrado, hacemos dos repeticiones muy buenas y damos el ejercicio por terminado. Trosky lo ha hecho estupendamente y yo he sido capaz de ayudarle.

Pasamos a la segunda parte. Seguimos aprendiendo a pasos agigantados, esta vez para que Trosky pueda llegar a Isra y este le premie con el churro, Trosky tiene que mirarme y una vez que lo haga se le envía. Fácil, ¿verdad? Pues no. Y eso que Isra me ayudó en todo lo que pudo, le falto desaparecer, quizás también influya que a Trosky le gusta mucho jugar con Isra. Vamos a ello: le sentamos a nuestro lado e intentamos y tenemos que lograr que nos mire. Con ayuda divina y haciendo alarde de todos mis conocimientos (resumiendo, Trosky me mira…, sonidito sexy, pedorretas como si fuera un bebe, ayudándome con la mano… en fin un espectáculo), consigo que me mire y puedo mandarle, se sienta frente a Isra, empieza a ladrar y este le confirma. ¡¡¡¡Muy bien mí chiquitín!!!!. Es increíble lo rápido que aprende, Sits, me coloco a su lado y consigo que me mire sin tanta ayuda. Lo hacemos otra vez y, sin decir nada, lo hace, lo cazo y puedo enviarle, confirmando Isra a la perfección. Por fin he sido capaz de cazar lo que yo quería. Como dice Isra: “si el perro nos regala algo, lo cogemos” y esta vez lo he conseguido.

Bastante contento con el resultado, damos por finalizado otro entreno. Esta tarde hemos hecho un poco de Pop, todavía nos queda mucho para llegar a hacer Rock&Roll, pero vamos consiguiéndolo.

¿Recuperando Sensaciones...?

01/04/2014

Volvemos a la carga. Hoy vamos hacer el sentado que viene en la BH. Comenzamos como siempre, un poquito de movimiento, nos conectamos con Trosky y empezamos a funcionar. Nos colocamos en posición base, Fuss y salimos, damos unos cuantos pasos, paramos, le mandamos Sit y seguimos avanzando, nos damos la vuelta esperamos unos segundo y nos colocamos al lado del perro, premiamos y liberamos.  Este sentado no tiene secretos para mi amiguete, con Almu hace el sentado sobre la marcha bastante bien y este es un poco más sencillo porque la parada es muy clara. (Esas son mis sensaciones, todo sea que el día que lo tengamos que hacer la pifiemos…) Para muestra un botón.

                                (Sentado sobre la marcha con Almu en el Parque)

Al haber hecho este ejercicio bastante bien, vamos al salto. Le hemos colocado en la posición más alta y como tenemos gente de la asociación, Sandra, Yanira y Carlos, les colocamos cerca del salto, para que el perro gestione que tiene que saltar aunque haya gente. 

Buenos, ¡vamos al lío! Nos colocamos en la posición base, en el centro del salto, le envíamos al salto y Trosky al ver tanta gente alrededor del salto, duda un poco y le cuesta saltar un poco tocando el salto, Isra le espera al otro lado con comida, llega sin problema y se tumba. Como ha golpeado el salto, compruebo que el perro no se ha hecho daño y que se encuentra en perfecto estado físico, ahora toca ver como esta su cabeza. Le volvemos a enviar y duda un poco pero, esta vez sí, le animamos más y el perro salta sin problema. Al observar que el perro sigue teniendo alguna duda a la hora de saltar, bajamos la altura del salto y hacemos un par de repeticiones, pero esta vez en lugar de mandarle desde la posición base, le mandamos desde la posición de tumbado y yo me coloco en un lado del salto (es como se le enseñó). Trosky salta sin ningún problema, contento y feliz… Le gusta saltar. Al ver esto, todos respiramos un poco más tranquilos, Trosky no ha cogido miedo ni ningún rollo raro con el salto.

Damos por finalizada esta fase del entreno, comiéndome un poco la cabeza. Al haber introducido tanta gente alrededor del salto, para que el perro gestionara esto y costarle un poco, me preocupa no estar a la altura como guía por no haberle ayudado en ese momento, es un sensación un poco rara. Como si hubieras fallado a tu colega. (Donde él no llega, tenemos que estar nosotros para ayudarlo).

Ya, con la cabeza un poco mejor, vamos a que juegue con Isra a la presa, esto a Trosky le encanta e Isra lo hace muy bien. Tenemos todo preparado, un poquito de Fuss, para que Trosky entienda que hay que hacer las cosas con control, le tumbamos, Isra lo pone como una moto y dejamos que vaya libre, Trosky se sienta y comienza a ladrar, un par de ladridos contundentes y recibe su premio, ¡¡¡paseíto con su premio, porque se lo ha ganado!!!. Le tumbamos y le llevamos en junto para enviarle al Revier y que luego vaya a buscar a Isra. Trosky, que de tonto no tiene un pelo, me mira como diciendo: “Venga vamos hacia allí”, yo me siento y tú me envías al Revier para que pueda ir a dónde está Isra, ¿Te has enterado paquete?. Pues así lo hacemos, lo hace bastante bien, gira el revier, me mira y sale corriendo hacia donde esta Isra, se controla un poco para no tocarle y una serie de ladridos buenos y se gana su premio. ¡¡¡ Me gusta verle!!!

Le hemos dado caña y es hora de descansar, pregunto a Diana y a German, que habían venido a hacernos una visita, si les gusta lo que han visto y me dicen que sí, que ha estado bien. Pregunto tanto a la gente que va, porque conocen al perro desde que empezamos a ir a Compass y  me gusta saber su opinión. Normalmente la respuesta es que Trosky lo ha hecho muy bien y que yo tengo que mejorar. Poco a poco, esto no es fácil.

VUELTA A LA REALIDAD

27/03/2014

Bueno, bueno... Hoy estamos contentos, tenemos ganas de hacer cosas y de enfrentarnos a retos que hemos intentado y no hemos logrado, ha habido dos entrenos bastante buenos y estamos crecidos.

-Isra, hoy hacemos el Apport.

- Venga, me parece bien.

Así que ahí estamos, el Apport, Trosky y yo. Como la secuencia ya os la he explicado en una entrada anterior, no la voy a repetir. El caso es que lo intenté con todas mis ganas, mi mayor deseo, en ese intervalo de 5-10 minutos que duró el entreno, es que hubiera cogido el Apport. Pero no pudo ser… Isra me da una serie de indicaciones, para que la próxima vez que lo intente las aplique. Colocación del Apport, actitud, etc… Al no querer que Trosky cada vez que vea el Apport salga corriendo en dirección contraria, Isra se pone al mando y limpia el ejercicio consiguiendo en pocas repeticiones que Trosky se aproxime al Apport y vuelva a cogerlo. La verdad que cuando tienes que hacer un ejercicio y por más que lo intentas, no te sale y llega Isra en dos, tres minutos lo hace. Te dan ganas… en fin…

Como no nos podemos ir con este mal sabor de boca, Isra me dice: que al estar Eli, vamos a aprovechar a hacer la presentación al Juez. 

Bueno, algo que no hacemos mal del todo. 

Esta mi compañero tumbado, me pongo a su lado Sitz, Fuss y nos acercamos a Eliseo. Isra a su vez hace lo propio con Noor. Y nos presentamos a Eli. Bueno… parece que hemos hecho algo ¡¡¡Bien!!!, pero cuando parece que todo ha ido bien, Isra empieza a dar comandos a Noor, Sitzs, Platz, Fuss, paseo para acá, paseo para ayá y, cómo es normal, Trosky se desconcierta un poco y yo más. ¿¡Para que vamos hacerlo fácil, si podemos complicarlo!? Ala, otra nueva aproximación a Eli (El juez) e Isra hace la misma historia de antes, pero ya hemos aprendido (aquí o espabilas o te quedas a por uvas), cada vez que Trosky  me presta atención, comidita, pero claro con tanto comando se despista, cuando está atento salimos en Fuss, para romper el ejercicio, un par de veces más y con la saturación de comandos de Isra, el perro ya no hace ni caso ya solo este pendiente de mí (más o menos, para que voy hacer caso a este que habla tanto, si no, me da nada…). Y cuando teníamos que dar el ejercicio por terminado, le digo a Eli que me ayude a una cosa con Trosky. ¡Madre!, para que queremos más… Que si voy a mi bola, que si tal… No me había enterado que teníamos que terminar antes. Hoy estamos sembraos.

Venga, vamos a ver si para terminar hacemos bien la última parte. 

Continuamos trabajando la fase en la que el perro se tiene que sentar y ladrar. Esto la semana pasada el perro lo hizo bien. Yo solo tenía que sujetar la correa, felicitar y poco más, el resto lo hacia Isra y Trosky. Esperemos que sea así.

- Don Jose, te llevas a Trosky lo tumbas y me lo envías.

Yo más feliz que todas las cosas, algo facilito. Le tumbo, le envío, todo bien.

Pero amigo… vamos a pedir un poquito más. Al tener otro revier y que Trosky ya sabe ir a dos revires. (Como dije en la presentación, son tres años enredando).

Isra me dice: le quitas la correa, le tumbas, le dices junto y te le llevas al revier, que se siente, le envías y le dejas que llegue a dónde estoy yo.

-Ok le digo.

El perro está tumbado, me pongo a su lado, le digo “junto” para que nos fuéramos al punto donde se tenía que sentar y el perro me sigue a regañadientes como diciendo, ¡¡pero tío!!, ¿dónde vamos?, ¡que a mí lo que me gusta está en dirección contraria!. Nos acercamos un poco al revier y, como él ya se lo sabe, sale corriendo al revier, gira como nunca le había visto girar, me mira un poco y sale corriendo al revier en el que está Isra. Y pienso… es listo de cojo… si esto hace que no lo hacía diez meses, por lo menos, y lo que había antes era un pelota y ahora esta Isra que le da lo que le gusta ¿cómo no va a correr…?.

Sucesión de errores:

1 Al perro le cuesta mucho ir en junto, porque tira más lo que hay en el revier, que yo y no soy capaz de hacerme interesante para él.

2 El perro sale al primer revier, sin sentarse y sin que se le diga que puede ir.

¿Se puede hacer peor? Pues probablemente sí, pero por suerte no hice nada más mal.

Segundo envío, con mucho más control sobre Trosky, el perro sale en “junto” a duras a penas, llegamos al punto donde se tiene que sentar y se sienta, mirando al revier donde esta Isra, pero se sienta, le señalamos el primer revier y va corriendo, sale de este primer revier y va a buscar a Isra como alma que lleva el diablo. Un poquito mejor. Todavía queda mucho, pero un poquito mejor. Poco a poco.

Al terminar antes, me quedo charlando un ratito con Isra, Eli y Javi, que había llegado hace un rato. Ellos me dicen que no ha estado tan mal, que es muy complicado… y pienso… que quizás hoy no ha estado del todo mal. Era mi estado de ánimo, venía de dos o tres tardes en las que estaba bastante contento con lo que habíamos hecho y quizás me esperaba que hoy fuera como las anteriores. Pero, para avanzar, hay que hacer cosas nuevas y hoy ha habido muchas cosas nuevas. Además como dice Isra “Si fuera fácil, lo haría cualquiera”.

                               Foto: Javier Payno