PRESENTACIÓN

Hola amigos del perro, mi nombre es Jose Manuel o “Don Jose” como más tarde me bautizarían mis amigos (familia) de Compass Dog, que es dónde casi todos los martes y jueves voy disfrutar de mi perro Trosky, un Pastor Alemán de tres años.

La verdad que el modo de conocer Compass fue un poco por casualidad o capricho del destino, no lo sé todavía, porque cuando empecé a buscar información sobre dónde aprender y cómo educar al perro, en la mayoría de las páginas web que visitaba aparecía el nombre de Israel González.

Os iré contando las aventuras y desventuras con mi perro, Trosky, un Pastor Alemán de tres años. Ya que gracias a él me sumergí en este mundo del adiestramiento deportivo.

Este blog, no trata de ser un manual de adiestramiento, ni nada por el estilo, podría decirse que será un diario de abordo, el cuál servirá de pequeño homenaje para mi compañero de cuatro patas, parte fundamental del Tamdem “Perro-Guía”.

Espero que os guste.

¡Un saludo para todos!!!!

viernes, 4 de julio de 2014

REVIRES



20/05/2014

Se acabó el buen tiempo de momento, hoy hace esos días de primavera, un poco locos. Estamos especialmente cansados, Isra me lo nota en la cara, con lo cual puede ser que hoy se apiade de mí. Pero, no todo va a ser quejarse, hoy ha venido bastante gente a la asociación y puedo disfrutar de los trabajos de mis compañeros. Pero… a las 19h en punto, arrancamos.
Ya tenemos a nuestro compañero tumbado y, aprovechando que Isra anda por ahí, hacemos un poco de Plats con distracción, hasta que llega y acordamos que es lo que vamos hacer.
Tenemos a Trosky en el punto que nos gusta, orejas tiesas y esperando que le mandemos hacer algo, nos colocamos delante de él y…

- Don Jose. ¿Por qué le quitas la correa?

- Costumbre.

- Llevamos tres entrenos que no se la quitamos.

Pues nada, vuelta a empezar, Trosky ya no está en ese puntito que nos interesa, pero se rehace muy rápido y cuando está listo comenzamos. Pasitos para atrás, en esta primera tanda, y el perro va muy bien. Ya no se desconecta, en todo el largo que hacemos, y podemos mantenerle bastante espacio en la actitud que nos interesa. El compromiso es muy bueno. Rompemos el ejercicio alternando comida y para terminar pelota.

Volvemos a la pista para realizar el Sitz y Platz sobre la marcha, ¡Trosky está que se sale! Llegamos a los pasos acordados, se para, mandamos Sitz y nos alejamos un poco, Trosky se queda clavado, repetimos la secuencia un par de veces y lo hace muy bien. 

En el otro sentido hacemos el Platz, llegamos a los pasos que nos interesan y Platz, Trosky se tumba, nos alejamos un poquito, no se mueve y confirmamos con comida. Volvemos hacerlo, pero esta vez el compromiso en los pasos para atrás no es tan bueno ya que empieza a estar más pendiente de lo que vamos a mandarle a continuación que de mantener su compromiso en los pasos hacia atrás. Así que toca empezar a regular las veces en que le mandados algo en el número de pasos acordados para que no este sólo pendiente de eso. Salvando este pequeño matiz, terminamos el entreno muy contentos.

Hoy sí toca jugar con Isra, mi amiguete, que ya se lo sabe, sale a darlo todo. Pero, esto tiene un orden, hay colocados dos revires y Trosky tiene que hacer los dos antes de llegar a Isra, que se encuentra en el segundo. Pero al haber trabajado tanto sobre el segundo, Isra se coloca en el primero sin que Trosky le vea. Vamos a ello, nos colocamos entre los dos Revires y le mandamos, Trosky duda, se gira a medio camino. Bueno, pués nos acercamos un poco, sale con un poco más de decisión, pero a medio camino, decide que está muy lejos, él donde quiere ir es al segundo ,que es dónde cree que esta Isra. Volvemos a intentarlo, le mandamos, parece que va a llegar, se despista un poco pero Isra sale del escondite obligándole a dar toda la vuelta al Revier si quiere recibir su premio. Tres intentos y uno medio aceptable. Repetimos el ejercicio y Trosky ya lo ha entendido, cada vez que hace el giro Isra le confirma, lo ha entendido tan bien que, en  un uno de ellos, Trosky piensa: “¡Para qué voy a dar toda la vuelta si va a salir por el otro lado!”. P, Isra que le ve, puede rectificar y hacerle volver a girar como a nosotros nos interesa.

Ahora toca que haga los dos. Pués nada, nos colocamos en la mitad de los dos. Hoy va muy bien, apenas se distrae mirando el Revier dónde está Isra. Posición base, nos giramos un poquito para que enfile el primer Revier. Lo mira, nos mira, nos sigue mirando y le mandamos, “¡madre mía como corre!”. Hace el giro, nos mira y le mandamos al segundo, al llegar unos ladridos buenos e Isra le confirma. Otra vez misma secuencia, le mandamos y ahora se queda a medio camino. Quiere llegar dónde está Isra sin pasar por el primer Revier, no pasa nada, le decimos que no, le volvemos a llevar a la posición de salida y le mandamos.

¡Ahora sí!, Trosky ha entendido que esto hay que hacerlo con orden, no como él quiere. No vamos muy contentos con el trabajo realizado, el perro se ha esforzado muchísimo y nosotros no teníamos más remedio que estar a la altura de lo que nos estaba regalando. Trosky, por muy cansados que estuviéramos.